Reclamo a la discordia en Girón

Un lío entre el alcalde de Girón y el Concejo municipal tiene aún viviendo en cambuches a los damnificados de la tragedia sucedida el 12 de febrero del año 2005 cuando se desbordó el río de Oro. Ojala ésta tragedia no sea otra oportunidad para la corrupción, tema recurrente en nuestro país, donde las regiones más ricas en recursos naturales y que generan mayor regalías son las más pobres y violentas.

Reclamo a la discordia en Girón: Lunes 13 de febrero de 2006.

15 mil damnificados de inundación del Río de Oro en Bucaramanga llevan un año en cambuches

El Alcalde de la ciudad responsabiliza al Concejo del retraso, porque no lo autorizaron a solicitar un préstamo para buscar recursos. El Concejo responde que no violará la ley y que detrás del afán del mandatario había otros intereses.

Donelia Moreno, de 41 años, ya perdió la cuenta de cuántas veces se han enfermado sus hijos menores y su nieto por el hacinamiento en el que vive su familia desde hace un año, cuando el Río de Oro se llevó su casa.Y mientras ella y los otros 15 mil damnificados que dejó ese desastre, tan solo en Bucaramanga, siguen esperando las casas que les prometieron, una pelea entre el Alcalde y el Concejo mantiene empantanado el programa de reubicación y ayuda a las víctimas.

Mañana se cumple el primer aniversario de las inundaciones más graves de los últimos años en Santander. La cifra total de afectados en el departamento llegó a 30 mil y hubo 26 muertos y pérdidas por 200 mil millones.Y pese a la crítica situación de los damnificados, que hoy están en 17 invasiones en Bucaramanga y Girón, el alcalde Honorio Galvis y la presidenta del Concejo, Luz Helena Mojica, no han encontrado manera de limar sus diferencias.

El proyecto en Bucaramanga ya tiene aprobación técnica y cuatro lotes con licencias ambientales en los que se están instalando redes de acueducto y alcantarillado. Pero el Concejo no aprobó un crédito pedido por la Alcaldía para completar los recursos que exige el Gobierno Nacional como contrapartida de los 51 mil millones que cuesta construir 2.222 viviendas. “Pondré el caso en conocimiento de la Procuraduría. Esto está detenido por necedad e indolencia de la concejala, que aún no nombra ponente al proyecto”, aseguró Galvis.

Mojica respondió que hay trámites que no se han cumplido y que el Alcalde está pidiendo que se viole la ley.

“No quisiera pensar que hay otras intenciones detrás de esta plata, pues hay una campaña electoral y el partido del Alcalde (Anapo) tiene candidatos a Cámara y Senado”, agregó. En el centro de esa disputa están familias como la de Donelia, que ayer no tenía dinero para el almuerzo porque su esposo está desempleado. Su esperanza está en lo que pueda hacer monseñor Juan V. Córdoba, representante del Presidente para la reconstrucción, que anunció que intervendrá porque “es imposible que un proyecto tan grande se frene por una discusión”.

"Lo perdimos todo cuando se metió el río. Que hagan rápido las casas para acabar este martirio”.

Donelia Moreno, damnificada.
FÉLIX LEONARDO QUINTERO

CORRESPONSAL DE EL TIEMPOBUCARAMANGA

Construían en las orillas

El Río de Oro nace en el sector oriental del área metropolitana, en zona rural de Piedecuesta. Atraviesa una importante zona industrial, densamente habitada, y durante años ha sido protagonista de desastres por inundaciones producto del invierno.

La mayoría de las 5 mil viviendas afectadas el 12 de febrero del 2005 estaban sobre las orillas del caudal. El cauce creció tras 17 horas de intensas lluvias y las edificaciones quedaron por debajo de su cota. La tragedia dejó 26 muertos y pérdidas por 200 mil millones de pesos.Para evitar nuevos desastres fueron evacuados los barrios afectados. Allí se prohibió construir y se han ejecutado obras de canalización de quebradas, levantamiento de muros en las márgenes del río y otros mecanismos de mitigación de inundaciones.Las obras se extienden por 18 kilómetros y valen 25.133 millones de pesos. En algunos tramos el muro de contención, que mide entre 5 y 6 metros, se extiende por 900 metros. En la segunda temporada invernal del año pasado no hubo emergencias, pese a las intensas lluvias.

Las promesas

El Gobierno y las alcaldías de Bucaramanga y Girón prometieron tener listas para el 2006 las primeras casas para las familias afectadas por la creciente del Río de Oro.Con recursos nacionales, departamentales y locales se prometió la construcción de obras de mitigación en el Río de Oro y sus afluentes.Entidades privadas ofrecieron colaborar empleando a las cabezas de familia de los damnificados.

Las obras

No se ha construido la primera casa. En Bucaramanga estarían listas las primeras 226 a mediados de este año. En Girón, después de analizar 23 predios, se seleccionó hace un mes un terreno para construir 2.200 viviendas. Las obras de mitigación se están construyendo.La mayoría de los damnificados sigue desempleada. Viven en asentamientos donde, según la Defensoría del Pueblo, hay casos de hacinamiento y violencia.